El jueves 16 de octubre a las 20hs se presenta el documental “Hay tiempo” en Ruth Benzacar, Juan Ramírez de Velasco 1287, en el barrio de Villa Crespo.   

En el año de su 60º aniversario, Ruth Benzacar Galería de Arte presenta un corto documental que narra, desde una mirada íntima y reflexiva, el entramado afectivo que ha sostenido a la galería desde sus inicios. A través de vínculos, memorias y experiencias compartidas, la pieza destaca cómo este espacio se ha consolidado como un referente del arte contemporáneo argentino.

Lejos de ser una revisión nostálgica, el documental propone una conversación activa entre pasado, presente y futuro. Su eje principal es el archivo institucional de la galería, entendido no como un acervo estático, sino como una herramienta viva que habilita nuevas formas de pensar y proyectar su historia.

Desde la primera investigación realizada por Fundación Espigas —en el marco de la publicación sobre Ruth Benzacar, a 40 años de la creación de la galería— hasta la reorganización y disponibilidad que permitió la mudanza al espacio actual en la calle Velasco, el archivo ha sido consultado y habitado por estudiantes, investigadores, curadores y periodistas. En ese sentido, puede pensarse también como un archivo del arte argentino.

El documental incluye además el valioso aporte del archivo de Gustavo Bruzzone, coleccionista y figura central para entender la historia del arte contemporáneo argentino, donado a la galería con motivo de los 60 años. Esta documentación amplía y enriquece la mirada de los años 90. También se incorporan materiales del archivo de la Biblioteca Narcisa Hirsch y registros personales del artista Leopoldo Estol. De hecho, el título del documental —»Hay tiempo»— surge de un grafiti realizado por Estol en su exposición La mañana del mundo (2004).

La realización del documental estuvo a cargo de Fiord Estudio, con dirección de Ivo Aichenbaum y Agustina Pérez Rial, quienes tras varios meses de investigación y entrevistas, construyeron una pieza sensible que da cuenta del legado vivo de la galería. Como parte de este entramado familiar, la música de esta pieza es original de Nicolás Bacal (hijo y hermano de las directoras) e Ismael Pinkler